La página web de cualquier empresa, sin importar el rubro, es un elemento importante en los objetivos que persigue en el canal digital. Además de reflejar la imagen de la organización, debe ser coherente con el posicionamiento de la marca que represente, porque lo más probable es que sea la principal vía de comunicación e interacción con el mercado y los clientes.
El diseño de una web que genere resultados no es una tarea fácil: se requiere coordinar e integrar visiones diferentes. Por eso, se debe asumir desde el principio que el resultado final siempre será mejorable. Un aspecto que se debe considerar son los plazos para que la web funcione. A ello se suman una serie de preguntas: ¿hasta dónde llegar con el desarrollo web?, ¿qué tipo de página quiere la empresa: informativa, interactiva y/o transaccional?, ¿de cuánto tiempo se dispone para terminar el proyecto?
Lo importante es que el proyecto maneje diferentes indicadores claves de rendimiento (KPI, por sus siglas en inglés) y métricas para lograr una mejora continua.
Una estrategia por fases es lo más recomendable para integrar alcance y tiempo para el desarrollo web. Esto significa que los requerimientos iniciales se definen por etapas, con objetivos claros para cada una de ellas. Esta estrategia permite detectar errores de diseño y priorizar los siguientes desarrollos que completarán la página web.
Primero hay que saber si se trata de un sitio nuevo o de uno que ya existe. Si es un sitio en funcionamiento, se debe evaluar su aporte a los objetivos que persigue la empresa. A partir de esta evaluación, se tomarán decisiones sobre los cambios que se realizarán. Las siguientes recomendaciones se pueden aplicar en ambos casos.
El desarrollo de una página web debe seguir un proceso y en el mercado existen diferentes metodologías que se pueden adoptar. Lo importante es que el proyecto maneje diferentes indicadores claves de rendimiento (KPI, por sus siglas en inglés) y métricas para lograr una mejora continua. Y tú, ¿consideras que es fácil desarrollar una página web? Cuéntanos tu experiencia.
Lo importante es que el proyecto maneje diferentes indicadores claves de rendimiento (KPI, por sus siglas en inglés) y métricas para lograr una mejora continua.
MBA de ESAN con especialización en Sistemas y tecnologías de la información. Licenciado en Ingeniería Industrial de la Universidad Fidelitas de Costa Rica. Experiencia profesional en empresas manufactureras y de servicios. Ha sido coordinador general del MBA de la Universidad ESAN y Director Ejecutivo del Consejo Latinoamericano de Escuelas de Administración (CLADEA). Es Jefe de Marketing de ESAN Graduate School of Business.
Los profesionales interesados en realizar un MBA perciben riesgos asociados a estos programas antes, durante y después de matricularse. Las escuelas de negocios deben tener claros estos riesgos para desarrollar estrategias que les permitan mitigarlos.
A pesar del buen desempeño que han registrado las billeteras digitales en el Perú durante y después de la pandemia, existen acciones que pueden tomarse desde el sector público y privado para impulsar más el crecimiento de este mercado.