A propósito del nuevo gobierno de Joe Biden, cabe analizar el impacto que tendrían sus políticas económicas en el mercado peruano. En esta línea, es importante considerar que aún estaremos influenciados por la evolución de la relación comercial entre Estados Unidos y China.
El pasado 20 de enero, tras un proceso cargado de mucha tensión, Joe Biden se convirtió, de forma oficial, en el nuevo presidente de los Estados Unidos y sucedió en el cargo a Donald Trump. Si bien su gobierno planteará una línea de trabajo distinta a la de su antecesor, cabe preguntarse si las nuevas políticas económicas que pueda impulsar impactarán de forma notable en la economía peruana.
Tras la sucesión de mando, el tipo de cambio en el Perú mantuvo su fluctuación regular y el valor de los commodities, como el cobre y el petróleo, continuó en ascenso. Sin embargo, estas tendencias explican más otros fenómenos ajenos a las elecciones en Estados Unidos. A pesar de la idea que puedan tener algunas personas de que los demócratas prestarían más ayuda a los países latinoamericanos, ya que no tiene discursos en contra como los republicanos, considero que su efecto sería neutral, en líneas generales.
Recordemos que, en el pasado, Estados Unidos tuvo presidentes demócratas como John Kennedy, que no necesariamente fueron "buenos amigos" de América Latina. Durante el gobierno de Kennedy se ejecutó el famoso Plan Cóndor, que apuntó a la erradicación de la izquierda en nuestra región. En ese sentido, hoy dependemos más de la situación económica en China y, sobre todo, de la evolución de su relación comercial con Estados Unidos.
Una vez iniciada la reactivación de nuestra economía, las exportadoras peruanas podrían apuntar a mejorar los lazos con Estados Unidos, debido al TLC.
El impacto de esta relación comercial quedó demostrado durante el gobierno de Donald Trump. La guerra comercial que mantuvo con China, así como su acercamiento a los países de Medio Oriente y la poca importancia que le dio a América Latina, generó expectativas negativas entre los inversionistas, de cara hacia los países latinoamericanos. En consecuencia, el tipo de cambio se devaluó porque los capitales se fueron hacia países industrializados y la bolsa local perdió valor.
Entre las medidas de Biden, que distan más de la gestión de Trump, destaca el regreso al Acuerdo de París para reducir la contaminación ambiental, lo que representaría una oportunidad de mejorar nuestra relación comercial con Estados Unidos. Recordemos que en el 2007 firmamos un tratado de libre comercio (TLC) con Estados Unidos y puede que, una vez iniciada la reactivación, las exportadoras peruanas apunten a mejorar los lazos con este país.
Para lograr este objetivo, es crucial una mejora de la infraestructura para el sector exportador de nuestro país, ya que aún no tenemos la capacidad suficiente como para aprovechar mejor el TLC. Además, y por trillado que pueda sonar, es necesario impulsar la elaboración de productos con valor agregado, en lugar de seguir exportando solo materias primas.
Todos estos cambios deben formar parte de una reforma estructural más grande. A nivel macroeconómico, el Perú ha tenido un buen desempeño durante los últimos 25 años. Sin embargo, y a pesar del despegue, no hemos hecho casi nada para aprovechar esta situación tan favorable. Es momento de cambiar. ¿Consideras que el cambio de Gobierno en Estados Unidos tendrá otras consecuencias? Déjanos tu opinión.
Una vez iniciada la reactivación de nuestra economía, las exportadoras peruanas podrían apuntar a mejorar los lazos con Estados Unidos, debido al TLC.
Ph. D. en Economía, West Virginia University. Maestría en Economía por la Universidad de Alicante. Licenciado en Economía por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Profesor Visitante en Jean Moulin, Lyon- Francia. Ex miembro del comité de la Presidencia de Consejo de Ministros para selección de Jefe del INEI.
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