Estamos ante la edición correspondiente al año 2011 del ya famoso Global Entrepreneurship Monitor (GEM), estudio de alcance mundial en que el Perú participa desde el 2004 a través del Centro de Desarrollo Emprendedor de la Universidad ESAN.
El GEM examina el fenómeno del emprendimiento y su relación con el bienestar económico de las naciones. Constituye, por ello, una herramienta de evaluación comparativa que ayuda a los líderes empresariales y políticos a identificar los factores que impulsan y limitan el emprendimiento en sus países y, por ende, a establecer políticas y estrategias para promover iniciativas de emprendimiento que redunden en una mayor competitividad nacional.
La novedad de esta edición reside en la perspectiva más amplia que adopta el GEM, pues en el comportamiento emprendedor considera tanto el de quienes trabajan por cuenta propia como el de aquellos empleados que dentro de las organizaciones se comportan como emprendedores (fenómeno conocido como intrapreneurship o emprendimiento corporativo). De ahí que esta vez se incluya todo un capítulo dedicado a la Actividad Emprendedora del Empleado (EEA, por sus siglas en inglés).
En cuanto a los resultados en el ámbito nacional, el índice TEA del Perú sigue siendo uno de los más altos entre las economías impulsadas por eficiencia, a pesar de que presenta una disminución con relación al año anterior. Además, nuestro país exhibe niveles favorables de percepciones, intenciones y actitudes emprendedoras de la sociedad, así como una alta proporción, respecto a los niveles de su grupo de economías, de negocios con mediana y alta expectativa de creación de empleo (MHEA). Sin embargo, el nivel de actividad emprendedora del empleado es muy bajo, tal vez porque la mayoría de las empresas son iniciativas de autoempleo.