El 2022 fue un año marcado por el crecimiento de la ciberdelincuencia en el mundo. En 2023, este escenario podría no solo mantenerse, sino empeorar. Según Cyber Risk Index (2022), el 82% de empresas de América prevé sufrir un ciberataque exitoso este año. Ante ello, urge reforzar las medidas de ciberseguridad. Para ello, implementar el modelo Zero Trust puede ser una solución eficaz.
El concepto Zero Trust nació en 2010 y fue una propuesta de John Kindervag, analista de investigación de la empresa Forrester Research. En este modelo, no se confía en ningún dispositivo o usuario para entrar a una red hasta que demuestre su autorización e identidad. Es un cambio de enfoque: del "confiar, pero verificar" al "nunca confiar, siempre constatar".
Normalmente, el sector TI ha empleado estrategias de seguridad perimetral para resguardar sus recursos. Bajo esta modalidad, solo se veía como amenazas a los usuarios que estaban fuera de una red privada. Hoy, con la transformación digital y el trabajo remoto, todo cambió. Los empleados ya no trabajan dentro de una oficina. Trabajan y acceden a los recursos informáticos desde muchos lugares y de distintas maneras.
Por lo tanto, ahora es posible encontrar a los usuarios tanto dentro de la red, como fuera de ella. Esto genera nuevas vulnerabilidades en el perímetro que pueden ser aprovechadas por agentes maliciosos (humanos o virtuales). En ese sentido, Zero Trust revisa las credenciales de un usuario que quiere entrar a una red. Solo mediante la autenticación y autorización de este modelo, el usuario tendrá acceso, más allá de si está afuera o dentro del perímetro.
Una persona que siempre se conecta desde Lima y ahora lo hace desde México será tratada como posible amenaza por Zero Trust. Aunque ponga bien su usuario y contraseña, esta tecnología monitoreará sus accesos e identificará cualquier anomalía en su comportamiento. Por lo tanto, lo someterá a una nueva prueba de autenticación para darle acceso o expulsarlo de la red.
Por otro lado, el modelo Zero Trust garantiza que los recursos y los datos de una organización sean inaccesibles por defecto. Esto significa que los dispositivos y usuarios sí podrán acceder a estos activos, pero de manera limitada. Además, este permiso se dará solo en circunstancias adecuadas y temporales.
Este año, se registraron más de 2 300 ataques de malware por minuto en América Latina, según Kaspersky (2022). El modelo Zero Trust potencia las estrategias de seguridad, reduciendo el riesgo de sufrir este tipo de amenazas y asegurar la confidencialidad, disponibilidad e integridad de la información. Así, los usuarios podrán conectarse de forma segura a una red, independientemente del lugar desde donde hagan la solicitud de acceso.
Por último, este modelo genera una reducción significativa del tráfico en las subredes, lo cual mejora el rendimiento de la red. Además, gracias a la granularidad, otorga un proceso de supervisión y registro mucho más simplificado y eficaz. De igual forma, usa técnicas preventivas para la detección oportuna de vulneraciones y respuesta inmediata.
Según Forbes (2022), los tres desafíos de la ciberseguridad en la nube serán "gestionar la identidad, cifrar la información y anticiparse a posibles amenazas". En ese sentido, el modelo Zero Trust encaja a la perfección. No solo detecta y responde a los ataques rápida y precisamente. Además, se basa en una idea de que ningún usuario se autentica una única vez.
Por otro lado, con las nuevas formas de trabajo, los usuarios, dispositivos y datos se están alejando cada vez más del perímetro de una empresa. Ahora que están lejos de su zona de control, es importante aplicar una estrategia para impedir eventuales riesgos o potenciales daños en la infraestructura tecnológica.
Finalmente, los perímetros convencionales se han vuelto complejos y anticuados para los actuales modelos de negocio. Hoy, los equipos de TI requieren una estructura de desarrollo ágil y segura capaz de proteger los datos empresariales. Y, al mismo tiempo, garantizar el funcionamiento óptimo y disponibilidad de las aplicaciones.
Fuentes bibliográficas:
Akamai. (s.f.). Modelo de seguridad Zero Trust.
Fontenelle, M. (2022, 11 de diciembre). 5 predicciones de ciberseguridad para 2023.
Según Cyber Risk Index (2022), el 82% de empresas de América prevé sufrir un ciberataque exitoso este año. Ante ello, urge reforzar las medidas de ciberseguridad. Para ello, implementar el modelo Zero Trust puede ser una solución eficaz.
MBA por ESAN. Certificación Internacional Black Belt Six Sigma en Wyrick-ESAN. Ingeniero Industrial por la Universidad de Lima. Certificación en Gobierno Electrónico (OEA), Ciberseguridad en William J. Perry Center USA, entre otros. Experto en dirección de proyectos de mejoramiento e innovación de procesos, gestión de calidad y tecnologías de la información. Ha sido Gerente de Tecnologías de la Información Comunicaciones y Estadística en el Organismo Regulador de las Telecomunicaciones en el Perú. Actualmente jefe de la oficina de proyectos del MBA, ESAN.
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