No existe empresa que esté libre de los conflictos laborales. Y es que todas las organizaciones están compuestas por personas. Seres humanos con inquietudes y opiniones. Entonces, cuando no encuentran consenso dentro de su entorno profesional, suceden los problemas.
Sin embargo, estos conflictos no son reacciones personales o temperamentales. Son problemas vinculados estrictamente con directrices laborales. Algunas de las situaciones que los desencadenan son las siguientes:
Ausencia de un propósito colectivo claramente definido y del liderazgo requerido para su conducción.
Mala comunicación y organización entre los departamentos de la empresa.
Falta de recursos para cumplir con las funciones diarias.
Mala planificación de objetivos que puede provocar competitividad malsana o timings ajustados.
Intereses y valores diferentes entre los miembros de un grupo de trabajo.
Mala gestión del clima laboral, que conlleva a la percepción de inequidad en el trato y las condiciones laborales.
Ante este tipo de situaciones, la gestión de conflictos laborales es una habilidad muy valorada por las empresas. Por lo tanto, urge desarrollarla adecuadamente.
Consiste en la destreza de un profesional para resolver los conflictos laborales con soluciones ágiles y efectivas. Asimismo, es la capacidad para transformar los problemas en oportunidades de mejora dentro de grupos de trabajo.
Una buena gestión de conflictos laborales permitirá que exista un buen clima laboral dentro de una organización. Este es uno de los aspectos más valorados a la hora de aceptar o renunciar a un trabajo. Un estudio de la consultora Dench, publicado en El Comercio, reveló que el 24 % de trabajadores peruanos considera abandonar su trabajo por el mal clima laboral.
¿Pero cómo prevenir los conflictos laborales y mejorar el entorno de los trabajadores? Para empezar, cabe aclarar que no existe una fórmula secreta para evitar todos los inconvenientes dentro de una empresa. Sin embargo, hay métodos y medidas que ayudan a prevenirlos. Aquí algunas de ellas:
Todos los miembros de la organización deben de conocer el ¿por qué? y la importancia de su labor individual en la construcción del esfuerzo colectivo que conlleve al cumplimiento de los objetivos estratégicos que permitirán mantener vivo el propósito de la organización.
Se deben fijar claramente las funciones de cada empleado, así como los plazos y estrategias que debe seguir. Estos lineamientos permitirán que el colaborador organice mejor su tiempo y eleve su desempeño. Mientras que la comunicación interna dentro de una organización tiene que estar basada en la educación y el respeto hacia todas las ideas y perspectivas. Así mismo, promover sesiones de retro-alimentación para ayudar al colaborador en el desarrollo de su labor.
Según Franklin (2009), el organigrama "es la representación gráfica de la estructura orgánica de una institución o de una de sus áreas", (p4). Se requiere definir la estructura que sea más acorde al apoyo de la estrategia de la organización, definiendo de manera simple y clara las responsabilidades y objetivos que cada miembro debe cumplir. No tener esta herramienta es una de las causas más comunes de conflictos laborales.
El comportamiento del líder, es el referente diario del equipo. La coherencia de su actuar alineado a los valores y atributos de la organización, desarrollan la confianza y la credibilidad necesarias para su gestión. Un líder cercano y empático, permite comprender los sentimientos e inquietudes de los demás, desarrollando y fomentando así la inteligencia emocional, que siempre debe estar presente. Esto no solo ayudará a disipar cualquier conflicto interno, sino que además mejorará el entorno laboral. Con ello la productividad de los trabajadores se incrementará y los resultados de la empresa serán mejores.
El fomentar espacios de reconocimiento, de socialización y acciones de team building, permitirá que los colaboradores mejoren su relación entre ellos. Por otro lado, cada trabajador notará que hay una diferencia entre lo personal y lo profesional. Esto ayudará a poner en contexto cualquier problema que pueda surgir.
Las nuevas tecnologías llegaron para agilizar muchas tareas profesionales, por ende, es necesario revisar los procesos internos a fin de ver oportunidades para implementarlas, puesto que esto ayudará a elevar la satisfacción del trabajador. Por ejemplo, los empleos en la modalidad de teletrabajo crecieron alrededor de 220 mil en diciembre del 2020 en Perú, según cifras del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE). Gracias a ello, los colaboradores integraron mejor su vida personal con la laboral.
En conclusión, los conflictos laborales siempre estarán presentes. Pero el deber de los profesionales (principalmente, quienes están al frente de un equipo de trabajo) es prepararse para afrontarlos y, principalmente, prevenirlos. Para ello, es necesario poner en práctica acciones y técnicas de forma constante.
Fuentes bibliográficas:
APD (2021, 2 de marzo). 10 tips para la prevención de conflictos laborales.
No existe empresa que esté libre de los conflictos laborales, sin embargo, estos conflictos no son reacciones personales o temperamentales, son problemas vinculados estrictamente con directrices laborales, por lo tanto la gestión de estos conflictos es una habilidad muy valorada por las empresas.
Coach Organizacional. Consultor y Facilitador de alto impacto certificado por la IFSc y GERZA (México). Ha desempeñado importantes cargos en empresas del Sector Público y Privado. MBA por ESAN. Programa de Alta Dirección por la Universidad Adolfo Ibáñez. Posgrado en Recursos Humanos y Finanzas.