Como puede desprenderse de su nombre, el término "coopetencia" alude a la mezcla de las palabras "cooperación" y "competencia". Suele usarse para describir escenarios donde participantes que regularmente serían competidores en un mercado deciden cooperar entre ellos para beneficiarse por igual, dividir y repartirse riesgos, o aprovechar la mayor fortaleza que mostrarían frente a terceros al actuar en conjunto. 

Por supuesto, este concepto se entiende y asocia a los casos de micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), sobre todo, si tomamos en cuenta las falencias y recursos reducidos con los que cuentan. El caso es distinto para empresas grandes, porque en esos supuestos, este tipo de uniones podría crear barreras de entrada y/o afectar el mercado y la libre competencia. 

Iniciativa estatal

El Consejo Nacional de Competitividad y Formalización estableció como uno de los objetivos para el 2021 generar las condiciones para desarrollar un ambiente de negocios productivo en el país. Así, busca fomentar la articulación sectorial y territorial apoyada en las mipymes.

El desarrollo de la coopetencia en mipymes también puede aplicarse a determinados sectores industriales como el emporio comercial de Gamarra.

Con esta iniciativa también se pretende fortalecer determinadas regiones y crear clusters de industrias específicas con la cooperación de los operadores locales. A su vez, se fortalecerán zonas, con base en sus atributos comerciales, como turismo, pesca o agroindustria, junto con la cadena de valor que esa articulación requiera. 

Campo de acción

El desarrollo de la coopetencia en mipymes no solo debe circunscribirse a regiones. También puede aplicarse a determinados sectores industriales, como el emporio comercial de Gamarra, donde propietarios de diversas marcas teóricamente en competencia deciden unirse y crear opciones que les permiten colocar sus productos en otros mercados, mediante la apertura de tiendas multimarca. 

Otros supuestos relacionados implican la unión de estos propietarios para ofrecer formatos outlets. En una etapa inicial, las mipymes pueden crear mejores probabilidades de crecimiento en el mercado y aprender, además, sobre las nuevas demandas de otros mercados, así como como perfeccionar sus productos y servicios. 

Desafíos pendientes

El objetivo de fomentar la formalización no solo se agota en la búsqueda de simplificar procedimientos para la constitución de empresas, toda vez que han mejorado con el tiempo y se espera que reduzcan más los plazos. Sin embargo, la demora y el desincentivo suelen provenir de las limitaciones que los Gobiernos locales y regionales imponen a empresas en el otorgamiento de licencias y su posterior fiscalización. 

El involucramiento de estas entidades en el desarrollo de ambientes de negocios productivos dentro de un plan macro impulsaría la estandarización y promovería la ejecución de determinadas actividades en zonas específicas. Todo ello para lograr un fin mayor, sea para la región o la comunidad de mipymes. ¿Son suficientes estas medidas? Déjanos tu opinión.