En general en las empresas mineras, así como en las empresas dedicadas a la búsqueda y selección de personal (headhunters) y de análisis empresarial, se percibe la falta de talento en el sector minero: gente adecuadamente capacitada a la cual se pueda recurrir en un momento determinado para cubrir sus necesidades.
Quisiera remarcar que el Perú forma muy buenos profesionales geólogos e ingenieros de minas, con excelentes capacidades en sus respectivos campos. Es necesario capacitarlos para que puedan asumir roles de liderazgo en las compañías mineras. Igualmente, hacen falta profesionales de otras ramas como la administración, contabilidad, finanzas, economía, que puedan aportar sus conocimientos al desarrollo de los proyectos mineros.
La minería en general es una industria que tiene ciclos económicos, ciclos de precios elevados que duran tres o cuatro años y ciclos de bajos precios como el actual, que posiblemente tome un mayor tiempo en recuperarse. Cuando hay un superciclo, como el que se dio del 2008 al 2011, se observa una fuerte competencia entre las empresas por captar talento. Cuando suben los precios de los minerales las empresas pueden competir por talento, pues tienen recursos más que suficientes para pagar muy buenos sueldos. Entonces proceden a la búsqueda de los mejores profesionales y se dan con la sorpresa que este tipo de profesional es escaso.
Ocurre lo contrario cuando caen los precios y se reducen los márgenes de rentabilidad de las empresas mineras. Aquí es necesario luchar por una reducción de costos. El proceso de reducir costos y mejorar la rentabilidad ya no está limitado a una disminución o cierre de las operaciones, acompañada de posibles despidos de personal; hoy se busca mejorar la competitividad en el sector, innovar en los procesos mineros, investigación para mejorar. Analizar los resultados y compararse con la competencia.
La industria minera hoy requiere de profesionales con otras capacidades, requiere de personal que conozca cómo manejar las relaciones con las comunidades que forman parte del entorno de la mina, que conozca y tenga una adecuada relación con las exigencias del gobierno sobre el medio ambiente, nuevas regulaciones de supervisión, etc.
Hay diversos estudios como uno realizado por EY que señalan que la escasez de talento se debe a la falta de capacitación de los profesionales, que se sienten seguros en sus organizaciones pero no mejoran sus habilidades y no son innovadores.
La industria minera hoy requiere de profesionales con otras capacidades, requiere de personal que conozca cómo manejar las relaciones con las comunidades que forman parte del entorno de la mina.
El problema, en consecuencia, se debe en general a la falta de políticas de desarrollo de talento. Ante ello se hace necesario encontrar soluciones. Cada uno de los sectores involucrados en el desarrollo de talento puede aportar al respecto.
En tercer lugar, pero no menos importante, está el aporte del Estado. Se requiere de mayores recursos para las universidades, así como la creación de facultades de geología e ingeniería de minas en provincias, especialmente en aquellas donde existe actividad minera. Resulta inaudito que en regiones con actividad minera actual o potencial haya muchos jóvenes estudiando otras profesiones pero no ingeniería de minas o geología. A esto se debe añadir una buena regulación, la facilitación y el fomento de la inversión privada en el sector minero, así como una eficiente intervención en la solución de los conflictos sociales.
Es de esperarse que en pocos años haya un nuevo boom minero con un nuevo ciclo de alza de precios internacionales, que tendrá como consecuencia el incremento de la demanda de talentos. Debemos estar preparados para estos ciclos de bonanza, desarrollando el talento humano para no desaprovechar el ciclo favorable para la minería.
¿Qué acciones concretas sugiere usted para resolver la escasez de talento en el sector minero?
La industria minera hoy requiere de profesionales con otras capacidades, requiere de personal que conozca cómo manejar las relaciones con las comunidades que forman parte del entorno de la mina.