"La tecnología, por su parte, puede ayudar a ahorrar tiempo y energía a los clientes, y a las empresas a reducir gastos de personal, alquileres, licencias, mobiliario, etc. La venta de pasajes en línea en las compañías aéreas y la solicitud de citas para obtener un visado en los consulados son ejemplos del uso de la tecnología en estos procesos. Las páginas web deben ser amigables, deben permitir la interacción entre los clientes y los representantes de la empresa a través del correo electrónico, así como, también la cancelación de una cita a través de la misma plataforma", señala el profesor Regalado en su blog "Gestión de servicios".