En el año 2012, la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV), creó el Mercado Alternativo de Valores (MAV) con la intención de facilitar el acceso a financiamiento en el mercado bursátil a las pequeñas y medianas empresas. En el siguiente artículo, explicaremos la importancia y la situación actual de esta medida.
Cuando se desea vender o comprar un producto se acude usualmente a un mercado. En el mercado se puede conocer el precio del producto por el cual vendedores y compradores estarían dispuestos a transar. Si un padre de familia desea comprar una televisión puede dirigirse a una tienda de electrodomésticos en donde encontrará televisores a distintos precios. Por su parte, un fabricante de televisores puede ofrecer sus productos en dicha tienda de electrodomésticos a algún precio de mercado. Sin embargo, si un accionista de una empresa pequeña o mediana desea vender su participación en la empresa o desea comprar una participación en ésta, ¿a dónde puede acudir y a qué precio debería transar la acción?
La importancia de disponer de un mercado en donde se pueda transar aquello que se desea -o requiera disponer- radica en la posibilidad de lograr un precio que reconozca la escasez del producto. En el caso de las acciones de empresas, la disponibilidad de un mercado permite que éstas sean más o menos apreciadas en función a su capacidad de generar valor (riqueza) a sus accionistas y, según ello, se determine un precio por acción de la empresa en el mercado al cual se pueda concretar la transacción de acciones entre compradores y vendedores.
Algunas empresas, sobre todo las de mayor tamaño, cotizan sus acciones en una bolsa de valores. La bolsa de valores se constituye en un mercado en el cual se pueden transar acciones de empresas. En este mercado se revelan los precios de las acciones de las empresas. Los accionistas de una empresa pueden acudir a los mecanismos establecidos en la bolsa de valores para poder vender alguna participación accionaria en su empresa a un determinado precio. Inversionistas interesados pueden también concurrir a la bolsa de valores para que, a través de sus mecanismos, compren cierta participación de acciones en empresas a algún nivel de precio.
La Bolsa de Valores de Lima (BVL) es la plaza a la cual pueden dirigirse las empresas en el país para poder negociar sus acciones. Esta constituye una opción para que las empresas coticen sus acciones y éstas puedan ser transadas a un precio de mercado. El precio de las acciones puede variar en el tiempo según el interés por las mismas. Como el fabricante de televisores, los accionistas pueden ofrecer sus acciones a un determinado precio. Y como el padre de familia, los inversionistas pueden adquirir acciones ofreciendo un precio de compra. A través de un proceso de negociación ambos actores concretarán una transacción de acciones si concuerdan en el precio de transacción.
Si un accionista de una empresa pequeña o mediana desea vender su participación en la empresa o desea comprar una participación en ésta, ¿a dónde puede acudir y a qué precio debería transar la acción?
El acceso a la BVL, sin embargo, presenta una serie de requerimientos como otras bolsas organizadas que, en general, solo lo llegan a cumplir empresas de mayor tamaño o facturación. En esa medida este mercado se ha mostrado poco accesible para muchas otras empresas, principalmente, las de menor tamaño o facturación, las denominadas pequeñas y medianas empresas.
En un esfuerzo en ese sentido, en junio de 2012, a través de una resolución de la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV), se creó el Mercado Alternativo de Valores (MAV), dirigido principalmente a empresas pequeñas y medianas, con menores requerimientos y costos de transacción. Al MAV, el cual forma parte de la BVL, pueden acceder empresas peruanas que registren facturaciones menores a S/. 200 millones anuales, en promedio y en los últimos 3 años. Estas empresas pueden registrar sus acciones u otros valores (de deuda) en la medida que no hayan tenido registros en otras bolsas, así como no estén obligadas a inscribir sus valores en el Registro Público del Mercado de Valores.
A la fecha, habiendo transcurrido 4 años, solo existen diez empresas registradas en el MAV que cotizan valores. De éstas, cinco ya han inscrito valores para poder ser transados, aunque estos valores se han circunscrito a instrumentos de deuda de corto plazo. La emisión de acciones estuvo restringida por la falta de reglamentación.
Finalmente, en agosto de 2015, la SMV emitió una resolución que aprobó el manual para el cumplimiento de requisitos aplicables a las ofertas públicas de acciones emitidas por empresas en el MAV, concretándose la posibilidad de que las empresas pequeñas y medianas puedan registrar y transar sus acciones. Luego de casi un año, esperemos que algunas de estas empresas aprecien la oportunidad de transar sus acciones para así lograr la revelación de sus precios de acciones en el mercado.
¿Qué opinas acerca de las acciones emitidas por el MAV para las pequeñas y medianas empresas?
Si un accionista de una empresa pequeña o mediana desea vender su participación en la empresa o desea comprar una participación en ésta, ¿a dónde puede acudir y a qué precio debería transar la acción?
Experiencia profesional de 20 años en posiciones de dirección, gerencia, consultoría y docencia, tanto en el sector público como en la empresa privada. Consultor e Investigador en estructuración, análisis de riesgos, financiamiento y evaluación de proyectos; cálculo de costos de capital y tarifas; adquisición y valorización de empresas. Ha sido Gerente de Contratos de Concesión en COSAPI S.A. Miembro del Consejo Directivo en OSINERGMIN. Ha ocupado cargos como Gerente Adjunto de Supervisión del OSITRAN; Gerente Administrativo de Servicio de Clínica; Asesor en el Gabinete de Asesores del Ministerio de Economía y Finanzas; Asesor Financiero en Concesiones de Infraestructura de Transportes en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones. MBA por ESAN. Licenciado en Economía por la PUCP.
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