Lo interesante es que mientras el autoservicio satisface una necesidad de compra semanal o quincenal, la bodega satisface una necesidad de compra diaria: por ejemplo, el ama de casa o el vecino que se olvidó de comprar algo en el autoservicio. Además, no olvidemos que el 40% de familias peruanas obtiene sus ingresos con frecuencia diaria. Ellos no pueden planificar una compra en un plazo más largo.