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Entérate más en la primera entrega "El fascinante juego del Markstrat"
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El hecho de que el Markstrat sea un juego no quiere decir que los consumidores en él no se comporten de forma muy racional. De hecho, los participantes no pueden subir y bajar el precio de un periodo a otro sin una buena razón, pues si el consumidor percibe algún indicio de que la empresa está jugando con el precio, automáticamente dejará de comprar y pasará a consumir otros productos similares.
Entre otras cosas, este juego de simulación ayuda a comprender que si se cuenta con poco presupuesto no se debe pretender manejar varios productos de mercado a la vez, pues lo que se estaría haciendo es desviar la atención de los recursos en muchos productos en vez de concentrarse sólidamente en unos pocos.
Por lo tanto, se llega a comprender que es infinitamente mejor contar con dos productos buenos que tener cinco malos. No debe olvidarse que a la larga lo que le interesa al accionista no es cuántos productos se tienen, sino cuál es la rentabilidad de su inversión, cuánto se le va a devolver.
Una de las cosas que se aprende con el Markstrat es que se debe siempre tener en cuenta a la competencia, ya que cuando se trata de gerenciar un negocio muchas veces tendemos a pensar que estamos solos en el mercado y desarrollamos productos sin reparar en que existen otros actores similares a nosotros.
Además, cuando se investiga y se crea un nuevo producto a través de I&D, se debe estar seguro de haber analizado bien las necesidades del segmento al cual se quiere dirigir dicho bien o servicio. De lo contrario, el producto lanzado al mercado no tendrá posibilidades de éxito (tal como ha pasado y sigue sucediendo en la vida real), lo que nos lleva a concluir que sin un buen conocimiento del mercado, no hay posibilidad de tener éxito.
Pero, incluso antes de todo lo mencionado, los participantes deberán decidir primero qué objetivo quieren lograr. Es decir, ¿quieren ser la empresa con mayor participación en el mercado en determinado producto? ¿O más bien quieren tener un producto en cada uno de los segmentos? ¿Van a dirigirse solamente a los segmentos con altos ingresos y profesionales? ¿O se enfocarán en los nichos de mercado que están desatendidos, que requieren productos a menor precio y en los cuales el margen de ganancia se producirá por volumen en vez de por precio?
En definitiva, el objetivo del Markstrat es que los profesionales aprendan a gestionar y tomar decisiones en marketing en base a los recursos que -algo que se enfatiza en el juego- no son ilimitados. En esa lógica, las personas cambian una vez que han participado de esta simulación, pues al inicio parecen creer que es fácil tomar decisiones, sin percatarse de que hay una serie de variables que manejar al mismo tiempo.
¿Cree usted que este tipo de simulaciones son efectivas para aprender de los errores y no volver a cometer éstos en la vida real?