Las prácticas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) poco a poco van abandonando espíritu netamente filantrópico para ser parte importante de la estrategia de gestión de las empresas. Para Kety Jáuregui, profesora asociada de la Universidad ESAN, la RSE no puede ser vista sólo como una ayuda de filantropía. "Es hora de que las empresas vean a la RSE como una herramienta para mejorar la rentabilidad, el clima laboral, el aumento de productividad y competitividad y el ingreso a nuevos mercados", dice.