Las empresas invencibles trabajan con base en la innovación constante de sus procesos, productos y servicios, para adaptarse con rapidez a las nuevas condiciones de su entorno. ¿Por dónde empieza este cambio?
El nuevo escenario que nos ha dejado la pandemia demanda empresas capaces de romper paradigmas en base a una reinvención total de sus modelos de negocio. Nos referimos a empresas invencibles, que trabajen en base a cuatro elementos clave: la flexibilidad, la adaptación rápida a las nuevas condiciones del entorno, la innovación constante y la anticipación.
Una empresa invencible trabaja para buscar un crecimiento exponencial, incluso agresivo, frente a sus competidores. Para ello, se sostiene en nuevas prácticas y tecnologías que le permiten reinventarse. Por un lado, explota su modelo de negocio actual, aprovecha las oportunidades del mercado e innova sus servicios y procesos internos. Por otro, explora nuevos productos, servicios y unidades de negocio, para fomentar una mejora continua con base en la experimentación constante.
Otra característica de estas empresas es que buscan prosperar a mediano o largo plazo, pero cosechando resultados constantes a partir de la forma en que gestionan el presente. Además, son disruptivas en el tiempo y trabajan con las nuevas condiciones de su entorno para sobrevivir. También cuentan con líderes ambidiestros, es decir, que emplean ambos hemisferios del cerebro para llevar adelante acciones que integren análisis y raciocinio, por un lado, y creatividad e innovación, por otro.
Por mucho tiempo, las empresas acostumbraban a crecer de manera lineal. Sin embargo, el entorno actual se ha vuelto más riesgoso e incierto. Una organización que desea ser invencible debe reinventar continuamente su modelo de negocio y fomentar la disrupción con soluciones escalables. Para mantenerse a la vanguardia, tiene que aprovechar al máximo las nuevas prácticas empresariales y las tecnologías emergentes.
La capacitación de la alta dirección y los ejecutivos en nuevos modelos de negocios, crecimiento exponencial, gestión ambidiestra, pensamiento crítico y agilidad es otro factor crucial para lograr un proceso de innovación exitoso. Hay que introducir la innovación en el ADN de la organización, como parte de la cultura interna, conformar equipos ágiles y trabajar el portafolio en base a un plan estratégico más ágil. También es preciso promover el espíritu emprendedor y aprender con rapidez de los errores.
Otro componente importante es la incorporación de personal que lo cuestione todo y con una mente abierta para la innovación, además de poseer competencias digitales y ser capaz de trabajar en equipo. También se necesita que posean un liderazgo transformacional y aptitudes para el trabajo colaborativo con base en tecnología, entre otras habilidades.
Las empresas invencibles necesitan expertos que desarrollen las condiciones para su crecimiento exponencial. Son negocios cuya sostenibilidad va más allá de la preocupación por el medioambiente, ya que también piensan en el bienestar de sus stakeholders y ejecutan acciones que benefician a todos, además de asegurar su propia rentabilidad. En pocas palabras, buscan crecer junto con su entorno. ¿Has impulsado estos cambios en tu empresa? Cuéntanos tu experiencia.
Una empresa invencible busca un crecimiento exponencial frente a sus competidores. Para ello, se sostiene en nuevas prácticas y tecnologías que le permiten reinventarse.
Coordinador Académico del PADE Internacional en Transformación Digital en Esan Graduate School of Business. Decano de la Facultad de Ingeniería, Director de las Maestrías en Dirección de Tecnologías de Información y Project Management de ESAN. Consultor internacional de empresas y organismos internacionales como BID, ONU, CAF, OIT, Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) y OVTA-APEC.
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