"El avance del sistema fue más o menos homogéneo -porque los contratos imitaron los parámetros establecidos en la primera concesión- hasta el 2005, cuando la concesión de la IIRSA Sur marcó un hito, pues incluyó la creación de herramientas valiosísimas para el financiamiento de los proyectos: el PAO (pago por avance de obras) y el PAMO (pago por mantenimiento y operación)", Sergio Bravo.
"Las concesiones son la mejor vía para cerrar la brecha que tenemos en infraestructura y que afecta nuestra competitividad. Pero tenemos que mejorar el sistema para hacerlos sostenible", René Cornejo.