Coaching y Programación Neurolingüística (PNL) en la Dirección de Proyectos

Coaching y Programación Neurolingüística (PNL) en la Dirección de Proyectos

¿Cómo te comportas y cómo se comporta tu equipo a la hora de dirigir un proyecto? y, ¿cómo se integran de forma efectiva con sus clientes, tanto internos como externos? En este artículo se verá de cerca la importancia del Coaching y la PNL en el fortalecimiento de la relación con los clientes.

Por: Antonio Grande el 19 Septiembre 2016

Compartir en: FACEBOOK LINKEDIN TWITTER WHATSAPP

Los proyectos son entes que tienen un principio y un final. En ellos, cualquier cliente interno y externo, se siente satisfecho cuando se transmiten un conjunto de valores y sentimientos que permiten atender satisfactoriamente sus necesidades en los proyectos los rodean. 

Para ello, nosotros -como personas individuales y como parte de equipos-, debemos apoyar con conocimientos y habilidades, gestionando los posibles conflictos de interés y traducirlos en satisfacción, permitiendo detectar nuevas oportunidades de negocio y colaboración en el futuro. Recordemos que la relación de esfuerzo y coste entre generar un nuevo cliente y mantenerlo es de 9 a 1. ¿Qué hacemos, entonces, para que ese esfuerzo valga la pena?

Es vital que el cliente se sienta atendido y cómodo desde el primer contacto, y que tenga una impresión positiva tanto de nuestra empresa como de nosotros mismos. De ser así, tendremos un cliente fiel que confiará en nosotros para desarrollar sus proyectos y/o para desarrollarse en los equipos que ejecutarán dichos proyectos. 

Debemos crear dentro -y fuera de la oficina- la disposición para una relación agradable de acompañamiento con el cliente, que determine así la calidad de nuestra manera de trabajar y que aboque a la generación de nuevas oportunidades de negocio en un futuro para ambas partes. Lo importante generar un vínculo en el espacio tiempo que nos permita seguir colaborando de manera efectiva.

Desde hace once años, utilizo el coaching y la programación neurolingüística como excelentes herramientas para comprender de manera práctica el comportamiento humano en la dirección de cualquier proyecto personal o profesional.

El papel del Coaching y la PNL

Desde hace once años, utilizo el coaching y la programación neurolingüística como excelentes herramientas para comprender de manera práctica el comportamiento humano en la dirección de cualquier proyecto personal o profesional. Ambas disciplinas muestran de manera práctica como la mente humana trabaja, y la forma en que las personas aprenden, se motivan, interactúan, se comunican, evolucionan y cambian.

Para la aplicación en equipos de trabajos es extremadamente útil, pues permite desarrollar las habilidades de la persona para que aprenda a utilizar su comunicación de manera efectiva y así reprogramar una actitud como individuo y como parte del equipo en el proyecto a desarrollar, siempre enfocado y alineado hacia el éxito del mismo.

¿Qué pasaría si cerráramos los acuerdos de forma más rápida y efectiva?, ¿si fuéramos percibidos de una manera más confiable?, y ¿si comprendiéramos en la comunicación con el cliente los aspectos importantes a tener en cuenta para convencerlo? En otras palabras, ¿qué pasaría si mejoráramos nuestra inteligencia emocional y nuestra capacidad de relación con el entorno profesional y personal? Sin duda, nuestra vida sería más sencilla. 

En una vida más sencilla, el rapport, feedback limpio, empatía, resiliencia y asertividad, deben marcar nuestra nueva forma de desarrollar eficazmente a nuestros equipos para cumplir los objetivos alineados con el cliente. Estas herramientas son parte del Coaching y la PNL, y nos enseñan técnicas profundas para generar estados deseados en las personas, desarrollando en cada reunión una relación de credibilidad y confianza en los demás en relación a ser y parecer.

En esta época maravillosa en la que convivimos cuatro generaciones distintas (BB, X, Y y Z), cada uno de nosotros debe interiorizar la importancia del servicio de alta calidad como atributo diferenciador para generar mejores relaciones laborales, más efectividad en los procesos de trabajo, y llegar a acuerdos como mecanismo de fidelización con los clientes. En resumen, debemos aplicar las competencias adquiridas al quehacer diario en la ejecución y dirección de proyectos para ser más felices.

Desde hace once años, utilizo el coaching y la programación neurolingüística como excelentes herramientas para comprender de manera práctica el comportamiento humano en la dirección de cualquier proyecto personal o profesional.